No se trata de probar o demostrar nada científicamente, no se tarta de juzgar, interpretar o poner en duda… Se trata de ser, hacer, sentir y ver el resultado en tu vida y en la de los demás… El resultado final es lo que nos confirma que algo va mal o que todo está en armonía. El malestar colectivo nos confirma que algo no va bien y que necesitamos cambiar, transformar y sanar nuestras relaciones personales y afectivas…
Cuando sentimos incomodidad con algo nuevo o cuando nos llega información nueva y nos crea malestar es porque dicha información llega a nuestras células y estás se revolucionan. Esa revolución interna es necesaria para poder cuestionarnos las cosas, revisar nuestras creencias y finalmente tomar conciencia.
Necesitamos cuestionarnos las cosas, revisar todas nuestras creencias limitantes y hacernos nuevas preguntas que nos llevarán a nuevas y diferentes respuestas y desde allí poder tomar decisiones más conscientes que nos llevarán a tener resultados diferentes en nuestras relaciones y en nuestra vida.
Quien necesita evidencias científicas de que la Crianza Consciente y la Educación Emocional (CCEE) son el camino para la Paz, el Amor y la Libertad es alguien que no puede aún llegar a sentir, respetar y amar a su niño interior. Es alguien que fue suficientemente respetado y amado y por eso pone en duda que el amor y el respeto quizás no sean el camino.
Hay hechos y experiencias que no necesitan de evidencias científicas para saber que estamos en el camino correcto y deseado. Observando a nuestros hijos podremos saber si están en armonía y si sus necesidades están o no siendo satisfechas. No necesitas evidencias científicas para darte el permiso de respetar, escuchar, complacer y amar a tus hijos incondicionalmente.
Siente, observa, escucha y ama a tus hijos y demás personas sin tener que demostrar nada a nadie.
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